·         La diputada Sandra Camino censura las condiciones de clasificación específica de los establecimientos, que “dejan fuera a iniciativas como apartamentos impulsados por habitantes de pueblos que invierten en rehabilitar sus propiedades” y ayudan a revitalizar las zonas rurales

·         “Los bonos de turismo fueron anunciados en agosto de 2024 y publicitados en noviembre con una previsión de gasto de 600.000 euros, pero no se abrió su convocatoria hasta el 8 de julio de 2025, casi un año después de su primera mención”, critica

27 de julio de 2025.- “La reciente convocatoria de los bonos de turismo rural que el sector lleva esperando un año, ha generado más incertidumbre que soluciones, evidenciando una falta de previsión y una exclusión de establecimientos que socava los esfuerzos de desestacionalización que las empresas privadas intentan llevar a cabo”.

Así lo considera la diputada del Partido Popular, Sandra Camino, quien lamenta que “ante los signos de estancamiento” que registra en Asturias en el sector del turismo rural”, el Gobierno de Adrián Barbón no reacciona, defrauda y continúa con su lamentable gestión”.

Sandra Camino ha denunciado que las condiciones impuestas para acceder a los bonos turísticos “excluyen a numerosos establecimientos rurales que, a pesar de estar ubicados en entornos rurales y contribuir al desarrollo de sus zonas, no cumplen con la clasificación específica de ‘Alojamiento de Turismo Rural’ en el Registro de Empresas y Actividades Turísticas del Principado”. Esta circunstancia, señala la diputada, “deja fuera a iniciativas como la apertura de apartamentos turísticos impulsados por habitantes de pequeños pueblos que invierten en la rehabilitación de propiedades para atraer visitantes y revitalizar generando riqueza en sus zonas».

“¿Qué pasa con una persona oriunda de un pequeño pueblo de 100 habitantes que decide restaurar sus cuadras y sus pajares para crear apartamentos turísticos? Pues la sorpresa es que se encuentra excluido de este programa», señala apuntando que esta limitación “desvirtúa el propósito de apoyar el desarrollo rural, la diversificación de la oferta y el propio reto demográfico”.

De otro lado, Camino ha criticado “la falta de previsión y la lentitud en la implementación” puesto que “los bonos de turismo fueron anunciados en agosto de 2024 y publicitados en noviembre con una previsión de gasto de 600.000 euros, pero no se abrió su convocatoria hasta el 8 de julio de 2025, casi un año después de su primera mención”. Este desfase en las fechas “ha condicionado y, sobre todo, ha perjudicado al sector porque ha habido momentos clave como el puente de mayo o la Semana Santa que no ha podido beneficiarse de los bonos”, indica. Pero, a mayores, “se ha desperdiciado la posibilidad de contribuir a la desestacionalización de la oferta turística en los primeros meses del año, cuando más lo necesita el sector, al haber limitado el canje de los bonos entre el 15 de septiembre y el 31 de diciembre, dejando fuera cuatro meses de temporada baja, un periodo crucial para dinamizar la actividad y generar ingresos fuera de la temporada alta”. Esto, evidencia Camino, “podría llevar a que muchos alojamientos rurales opten por no adherirse al programa, al no resultarles rentable”.

La situación se agrava con la gestión de otros eventos, como el Congreso de Turismo Rural, anunciado para septiembre y pospuesto a noviembre “sin una comunicación clara ni un anuncio oficial de la nueva fecha”. Esta falta de planificación, subraya Camino, “contribuye a una creciente sensación de incertidumbre y erosiona la confianza en las políticas de apoyo al turismo rural”.

En definitiva, zanja la diputada, “el Gobierno del Principado no escucha   realmente las necesidades del sector turístico, no implementa políticas con una visión a largo plazo, ni da mayor agilidad y una inclusión más amplia de todos los actores que contribuyen al desarrollo de las zonas rurales de Asturias”.